“Vainilla y mimosa, intensidad y sutileza, seducción y encanto, un dúo creado por la perfumista independiente Vanina Murraciole, que promete encuentros seductores y un retorno a la ligereza”.

Al principio hay vainilla, por supuesto, pero es una vainilla inesperada: sutil, etérea, como suspendida, con una nota única de mimosa empolvada y melosa. Luego viene una vainilla que es gourmet pero no embriagadora, afrutada pero no horneada, equilibrada entre un helado de vainilla "real" y dulces promesas que resuenan como besos lánguidos.

Una estela de fragancia inequívoca, concebida como un llamado, que despierta el apetito y pone de relieve a quien la lleva. Ya sea que tu personalidad sea discreta o, por el contrario, completamente intensa, este perfume está hecho para aquellos que desean no volver a pasar desapercibidos nunca más.

“De día lo llevo como una firma: sabes que estoy ahí, mi perfume me identifica.

De noche me envuelve en dulces promesas.

Llena el espacio, se desliza en todos los rincones de la mente y hace que los demás sientan un vacío cuando me alejo”.

Y si ya no estoy y mi ausencia aún no se ha vuelto abrumadora, debe ser que dejé algo atrás: una bufanda, una chaqueta, un poco de mí”.

Notas de salida: Absoluto de mimosa, absoluto de vainilla.

Notas de corazón: Azúcar moreno, vainilla.

Notas de fondo: Bouquet de almizcles blancos, vetiver, ámbar.

Perfumista: Vanina Muracciole

Hecho en: Francia