La elaboración de las fragancias de autor es un proceso delicado y largo por la naturaleza de sus materiales, que se lleva a cabo mediante procedimientos de carácter artesanal y a pequeña escala, utilizando sofisticados procesos de extracción y producción. Algunas fragancias requieren de un proceso de maceración que rebasa los 6 meses por lote, con la finalidad de adquirir el resultado de concentración deseado, que es por mucho superior a lo que puede encontrarse en el ámbito comercial.

Siguiendo con la misma línea conceptual, el empaque, las botellas y los elementos de decoración también son elementos de lujo con una pieza de significado. Por ejemplo, las botellas Amouage están inspiradas en dos símbolos patrios de Omán, su país de origen: Las botellas masculinas representan un khanjar, la daga que es el emblema nacional de Omán; mientras que las botellas femeninas representan la cúpula de la mezquita del Sultán Qabus, la mezquita más importante del sultanato de Omán. A su vez, ambas botellas cuentan con un cristal de Swarovski en el centro de sus tapas. Las fragancias Amouage fueron creada originalmente como un regalo para los reyes, y su estandarte refleja su larga historia y legado.

Historias así se cuentan en cada fragancia, en cada pieza, utilizando los procesos más sofisticados para lograr la calidad de excelencia que distingue a este tipo de perfumería.