Ganadora al premio EXIPA Concept Award 2023 como la mejor historia detrás de la creación de una fragancia de autor.

Una ofrenda de cinco embriagadoras flores mexicanas veneradas por los antiguos aztecas.

Agosto de 1400, Tenochtitlán, México.

Sobre la fiesta más fragante del calendario azteca, el ritmo de los tambores palpita, abundan flores que se ofrecen en los altares de los templos. Nubes ondulantes de copal actúan como telón de fondo para el aliento embriagador de nardo, magnolia, plumeria y el intenso aroma amarillo de la caléndula sagrada, cempoalxochitl.

En el México azteca, las flores eran una augusta ofrenda a dioses y príncipes. Transportándote a un altar del templo donde montones de flores exudan su embriagador aroma, Flor y Canto es una fragancia floral blanca con una sutil base de incienso de copal. Centrándose en esencias naturales y absolutos de la más alta calidad de cinco flores nativas mexicanas: nardo mexicano, magnolia grandiflora, plumeria, caléndula y acacia silvestre.

Cinco flores mexicanas ofrecidas en los altares de los templos que los aztecas creían que eran el aroma embriagador de Xochiquetzal, la diosa de la belleza. Natural, opulento y explosivo.

-En la lengua azteca, una metáfora de la poesía es “in Xochitl in Cuicatl” (Flor y Canto), que ejemplifica la importancia de la flora en México. Xóchitl, o “flor”, se usaba para referirse a palabras elocuentes, elegantes y bien usadas.

- Dos deidades aztecas estaban estrechamente asociadas con la flora: Xochipili, el 'Príncipe de las Flores' era el dios del verano. Se creía que el exquisito cuerpo de su esposa Xochiquetzal era la fuente de todos los aromas florales.

- Los dioses aztecas recibieron sus ofrendas a través de un humo fragante: el copal blanco, una resina de árbol aromática utilizada por las culturas mesoamericanas como incienso quemado, actúa como un telón de fondo fresco y mentolado para los ricos aromas florales.

- El aroma aterciopelado de Omixochitl o nardo mexicano se ve reforzado por una dulzura cálida pero fría que se pensaba que atraía a los espíritus benévolos.

- Las flores y hortalizas para el mercado de la Ciudad de México aún se cultivan en Xochimilco, una zona compuesta por jardines flotantes, conocidos como chinampas, que data de la época azteca.

Notas de salida: Acentos de acacia mexicana, caléndula y hojas trituradas. 

Notas de corazón: Absoluto de nardo, magnolia grandiflora y plumería roja y blanca. 

Notas de Fondo: Copal (incienso mexicano), benjuí y vainilla mexicana.

Familia olfativa: Floral opulento

Perfumista: Rodrigo Flores-Roux

Hecho en: Estados Unidos 🇺🇸