En la década de 1980, fue una de las pocas mujeres que siguió este camino profesional. Después de completar su formación, su primera parada como perfumista junior fue en IFF en 1987. En 2000, se unió al centro de diseño de fragancias de Firmenich y creó numerosas y variadas fragancias como Paul Smith Man, Encre Noire de Lalique y Another 13 du Labo. 

Nathalie Lorson se describe a sí misma como una buscadora. Su aspiración de crear constantemente algo nuevo y enriquecer el mundo de las fragancias con algo sin precedentes se centra en todas sus creaciones. Pero también busca el desafío de transformar los deseos y demandas de sus clientes en una fórmula de perfume y, posteriormente, en un frasco.

Nathalie crea para y con otras personas. Para ella, la creatividad es un acto de generosidad, que depende del intercambio de ideas para compartir y expresar emociones. Sin duda una Maestra de su arte, sin embargo se mantiene humilde, a menudo evitando ser el centro de atención. Su mayor recompensa son los "breves encuentros" que tiene al pasar junto a un extraño que lleva una de sus composiciones.

Ella desea crear fragancias simples pero resonantes en las que cada ingrediente se selecciona por su calidad, en la dosis perfecta, para maximizar la belleza de la creación final.