UNA FRAGANCIA FEMENINA PARA HOMBRES 

En los exuberantes meandros de un jardín laberíntico francés, tres hombres, intrigados por un aroma, emprenden el camino. 

¿De dónde viene este aroma? 

Los hombres serpentean, se pierden en su verdor, pero persisten. La mujer se funde con la vegetación, ocultándose entre los bojes. Solo queda la fragancia. La vivaz nitidez de los cítricos seguida de un audaz trío de vetiver. 

¿Qué es este misterioso aroma? Emergen en un claro, donde la mujer deja caer discretamente un frasco del perfume. Uno de los hombres se acerca y, mientras ella lo deja en un pedestal, él toma el frasco. La fragancia ahora es suya. 

EL AROMA 

A primera vista, se percibe una auténtica frescura hespéride, cítrica y verdaderamente elegante. A continuación, las maderas se suman al baile. Ricas, ligeramente ahumadas. La fórmula se basa en una dualidad entre la faceta masculina y poderosa de la raíz y el acorde cítrico, más delicado, refinado y fusionado. 

El resultado es genuinamente elegante, sofisticado incluso. 

LA BOTELLA  

El frasco del perfume es una invitación a pasear por la exuberante vegetación de un jardín francés. Decorado con un verde vibrante en el centro, que hace eco del trío de vetiver, complementado con un amarillo limón vigorizante en la parte superior y con un verde intenso en la base. Rematado con un tapón plateado y adornado con letras metálicas, el frasco exuda cierta elegancia, reflejando una fragancia que es a la vez fresca y sofisticada. 

Notas de salida: Esencia de bergamota, esencia de limón. 

Notas de corazón: Vetiver des Sables (India), vetiver (Haití), vetiver (Indonesia). 

Notas de fondo: Ambroxan, almizcle. 

Romano Ricci